Vistas a la página totales

sábado, 26 de noviembre de 2022

Emancipation


 

Por Oscar Fernández Herrera

 

Cuando Prince se libró de su contrato discográfico con Warner Bros. en 1995, rápidamente grabó las primeras canciones para “New World”, una obra que a la postre originaría al titánico “Emancipation”, un opus triple con treinta y dos pistas y tres horas de duración. De acuerdo con Michael B., baterista de The New Power Generation, la idea de grabar un álbum triple surgió cuando Prince comprobó cómo la firma SoundScan contabilizaba por separado las ventas de los discos dobles, especialmente con “HIStory: Past, Present and Future, Book I”, de Michael Jackson.

 

Posteriormente, durante una presentación en los estudios Paisley Park, en Minnesota, Prince le aseguró a sus incondicionales que “Emancipation” tendría 52 canciones, si bien el asunto se tomó como un simple comentario sardónico.

 

Considerado como un trabajo absolutamente solista, Prince, que en aquel momento ya se autonombraba con un glifo impronunciable, contó con la participación de dos diferentes formaciones de su banda acompañante. Del mismo modo, es importante señalar que también es el primer disco del artista que incluye canciones interpretadas por otros. “Betcha by Golly Wow!”, el primer sencillo comercial, es una canción original de The Stylistics.

 

Distanciado de los grandes álbumes del geniecillo púrpura, “Emancipation” es engañosamente desigual, pues en él se aprecia una sobreproducción con resultados casi plásticos. El público ha cuestionado por años la participación de Kirk Johnson como productor, aunque también ha sospechado otras consecuencias con Prince al frente de la realización.

 

El primer disco es una descarga de ritmos misceláneos, algunos de ellos increíblemente bien logrados: “Jam of the year”, “In this bed I scream”, “Right back here in my arms”, “I can’t make you love me” y “Somebody’s somebody”. Es una apertura jubilosa con algunas pinceladas de empalagosa melancolía.

 

El segundo volumen es puro corazón y, sin duda, es el mejor de los tres. En él sobresale el amor de Prince por su esposa Mayte García y su inminente paternidad que, desafortunadamente, no se logró. “Soul sanctuary”, “Dreamin’ about you”, “The holy river”, “Sex in the summer”, “Curious child”, “Joint to joint” y “Friend, lover, sister, mother/wife” son claras muestras de la genialidad de su creador.

 

La última parte de “Emancipation” es otro disco de canciones aisladas, sin un propósito definido. No obstante, figuran grandemente “Face down”, “Sleep around” y “My computer”, con la participación de Kate Bush.

 

A pesar de sus desproporciones e imperfecciones, es un disco que merece escucharse.

 

 

sábado, 19 de noviembre de 2022

México en los mundiales de futbol


 

Por Edgar Fernández Herrera

 

A muy pocos días del inicio del mundial de futbol en Qatar y del debut de la selección mexicana, hay que anotar que El Tri fue una de las cuatro selecciones que hicieron rodar por primera vez un balón en una justa mundialista de la especialidad, en Uruguay 1930, que se inauguró oficialmente con dos encuentros simultáneos.

El Tri ha participado en 17 ocasiones de 21 posibles; es un invitado recurrente en los mundiales de futbol.

México se enfrentó a Francia, un 13 de Julio de 1930, y su andar no fue muy afortunado, ya que perdieron 4 - 1. Juan “El Trompito” Carreño fue quien se hizo presente en el marcador.

La lista de los seleccionados nacionales fue la siguiente:

Porteros: Isidoro Sota y Oscar Yori Bonfiglio.

Defensores: Rafael Garza Gutiérrez Récord, Manuel Chaquetas Rosas y Francisco Garza Gutiérrez.

Mediocampistas: Felipe Rosas el Diente, Alfredo Sánchez el Viejo, Raymundo el Mapache Rodríguez y Efraín Amezcua.

Delanteros: Hilario el Moco López, Roberto la Pulga Gayón, Dionisio Nicho Mejía, Juan el Trompito Carreño, Luis Pichojos Pérez, José Pepe Ruiz, Felipe la Marrana Olivares y Jesús el Chiquilín Castro.

Todos ellos dirigidos por Juan Luque de Serrallonga y la participación del equipo fue desastrosa, regresaron con cero puntos.

 

Esperemos que sea diferente en Qatar 2022.

Los mejores discos de todos los tiempos según Rolling Stone

 

Por Edgar Fernández Herrera

 

Hace unos días un buen amigo, el Ing. José Luis Aguiñiga, me envió un link donde se mostraban los diez mejores discos de todos los tiempos, según la revista Rolling Stone. Habría que aclarar esta lista se publicó y actualizó en 2020 y, sobra decirlo, causó una gran controversia, ya que prácticamente todo el mundo no estuvo de acuerdo con su listado renovado.

 

La lista, desde su origen en 2003 y su actualización en 2012, consideraba discos de rock, pero en 2020 aceptó discos de pop y reguetón. Esto en sí no es malo, pero al mezclarlos, el resultado es toda una mezcolanza, así que creo que debió haber realizado listas por cada género y se hubiera librado tal controversia.

 

También debo anotar que en la lista desgraciadamente domina una inclusión muy forzada. Por otra parte, la corrección que domina a las conciencias de hoy impidió una selección según la calidad de los discos. Eso me hace concluir que Rolling Stone pensó más en la venta de su mediocre publicación y estar a acorde con los nuevos tiempos.

 

Analizar la lista nos llevaría mucho tiempo, así que concentrémonos en los primeros tres lugares.

 

3.- “Blue”, de Joni Mitchelle. No pondré en juicio el talento de la artista canadiense, pero hay discos muy superiores e influyentes realizados por otras artistas femeninas. Se me ocurren el “Horses”, de la grandiosa Patti Smith; el “I Got Dem Ol´ Kozmic Blues Again Mama!”, de Janis Joplin, la “Bruja Cosmica, o el “I Never Loved a Man the Way I Love You”, de Aretha Franklin.

 

El número dos es un tremendo pecado, pues Rolling Stone siempre ha querido vender a Los Beach Boys como una gran banda, y el grupo liderado por Brian Wilson es una de las grandes farsas de la historia de la música. Wilson, según RS, es un genio y es una mentira. El oriundo de Inglewood, California, no es un genio. Está muy lejos de verdaderos genios como Frank Zappa, David Bowie, Bob Dylan o Kurt Cobain. El disco considerado para el segundo puesto es el “Pet Sounds” que, a mi parecer, es unos de los discos más sobrevalorados, con un par de canciones buenas, nada espectaculares, y muchas de relleno. Hay discos muy superiores a éste; de hecho, si la cuestión es poner a Brian Wilson en el “olimpo rocanrolero”, él lo logró con una canción: la soberbia “Good Vibrations”, toda una obra de arte de escasos cuatro minutos, en donde las armonías vocales del grupo lucen a enormidades y los arreglos instrumentales son absolutamente hermosos, mas no con su Pet Sounds.

 

El número uno fue para “Whats Going On”, de Marvin Gaye. Espero que haya sido una coincidencia, pues es un gran álbum, pero hay que recordar que, en 2020, además de seguir sufriendo la pandemia, fue cuando se originó el movimiento “Black Lives Matter”. Marvin Gaye creó un disco increíble, pero ¿El mejor álbum de la historia? Lo dudo porque ni siquiera lo considero como el mejor del género “Soul”. “Otis Blue”, de Otis Redding, me parece mucho mejor disco.

 

Las listas son muy subjetivas, pero son guías. Para cuando uno está buscando alternativas, uno puede respetar los gustos musicales de cada persona, pero si entramos al terreno de qué es mejor, ahí la cosa cambia, y en el mundo del rock hay álbumes imprescindibles, y creo que ese fue el gran error de esta lista. No respetó la calidad de los discos sólo por quedar bien y seguir generando ganancias de manera sencilla.

 

 

Nadie nos va a extrañar

  Por Oscar Fernández Herrera     Con frecuencia leo cómo la gente idealiza las décadas de los años sesenta, setenta e incluso ochenta...