Vistas a la página totales

sábado, 15 de noviembre de 2025

El “Pop” de U2


Por Edgar Fernández Herrera

 

 

 

Hace 28 años, la banda irlandesa U2 publicaba su noveno álbum titulado “Pop”, un trabajo enormemente influenciado por los sonidos que dominaban al mundo en 1997: en general la música electrónica y, en particular, el trip hop, aunque sin perder el sonido característico de Bono, The Edge, Adam Clayton y Larry Mullen Jr.

 

En lo personal, es uno de mis álbumes favoritos del cuarteto de Irlanda, un disco arriesgado que sigue la línea de experimentación iniciada en 1990 con el soberbio “Achtung Baby” y que llega a su punto más alto en este trabajo de 1997. Pero en su momento, y hasta la fecha, ha sido un disco muy menospreciado por la crítica, los fans e incluso por los mismos integrantes de la banda.

 

Con un proceso de grabación bastante complicado —con Larry Mullen Jr. ausente en las primeras semanas de sesiones a causa de una cirugía en la espalda, la visión y manera de trabajar de los distintos productores que colaboraron con el cuarteto y, además, el inminente inicio de una gira mundial— U2, a pesar de haber pospuesto la salida del álbum de la Navidad de 1996 a marzo de 1997, entregó un producto final que no fue, y de hecho no ha sido, del agrado de los integrantes de la banda. Llegaron incluso a regrabar algunas canciones para sencillos y recopilaciones y, salvo en el PopMart Tour, las canciones de este disco han sido ignoradas en las giras subsecuentes.

 

Nunca lo he entendido; a mí me parece un gran disco con grandes canciones. Pop comienza con “Discothèque”, que de hecho fue el primer sencillo, quizás una de las dos canciones más flojitas del disco. U2 hace una parodia de las canciones disco de los setenta, pero con un toque moderno. El video es una maravilla: U2 vestidos como Village People, bastante cómicos, pero funciona. A continuación, la canción más U2 del disco: “Do You Feel Loved”, con un bajo distorsionado que le da mucha potencia a la pieza y una guitarra sencilla (si se me permite la expresión), pero con sus toques de electrónica.

 

“Mofo” es el claro ejemplo de lo que U2 intentó con el álbum: mezclar el sonido característico de la banda con electrónica, casi sonando a una pieza techno. La letra es muy personal; en ella Bono lamenta la pérdida de su madre y cuánto la ha necesitado. Durante la gira, esta canción abría los conciertos; previa a ella sonaba “Pop Muzik”, un viejo éxito discotequero, para enlazarla con “Mofo”. “If God Will Send His Angels” es una gran balada en la que Bono clama por la ayuda de Dios y en la que destaca la guitarra de The Edge.

 

El segundo sencillo, “Staring at the Sun”, quizás la canción más popular del disco, es, contrario a la temática general del álbum, una pieza predominantemente acústica. Pasamos al tercer sencillo, “Last Night on Earth”, que de hecho fue la última canción en grabarse. Gran pieza, con una saturación notable en su guitarra. Fue infaltable durante la gira; es una lástima que la hayan descartado en las giras subsecuentes. El video promocional es alucinante, con la aparición del gran William S. Burroughs. El experimento no muy bien logrado, pero bastante interesante, es “Gone”, un ejercicio de krautrock (sintetizador VCS3 incluido, interpretado por Flood). La canción data de las sesiones del emblemático Zooropa.

 

“Miami” es la canción que no ha sido de mi agrado; nunca he podido determinar por qué. Dicho esto, no hay mucho que decir sobre ella.

 

“The Playboy Mansion”, qué joya de canción: con una guitarra sensual y deliciosa, mientras Bono ironiza e incluso se burla de los tópicos pop: “If coke is a mystery, Michael Jackson history / If beauty is truth / And surgery the fountain of youth”. Vaya letra. Una de las grandes canciones de Bono y compañía; es una lástima que no se aprecie como tal.

 

Al igual que la pieza anterior, otra canción muy menospreciada —y que tuve la oportunidad de escuchar en ese lejano 3 de diciembre de 1997 en el Foro Sol— es “If You Wear That Velvet Dress”, con su atmósfera pesada, envolvente y sensual, y con una letra de deseo y espiritualidad, donde Bono se luce con una voz muy sugerente.

 

“Please”, gran canción con la marca de la casa, es decir, una base rítmica muy sólida (Larry Mullen y Adam Clayton lucen a enormidades), en la cual Bono lamenta que el proceso de paz en Irlanda no haya fructificado como se había planeado y prometido.

 

Para cerrar este gran disco, un portento de canción: “Wake Up Dead Man”, un tema muy sombrío, nada habitual en U2. Es una plegaria a Dios, pero también expresa un desencanto con la religión; diría que la letra es hasta blasfema, ya que reniega de la fe. La canción fue escrita durante las sesiones de Achtung Baby. Recuerdo que mi tío Alberto, el día del concierto, anhelaba que tocaran esa canción. Fue una lástima que no lo hicieran; hubiera sido un gran momento. Solo nos dieron una probadita al finalizar “One”: Bono empezó a tocar los acordes de “Wake…” y cantó unas líneas, para después despedirse del escenario.

 

“Pop” ha sido un álbum muy infravalorado, y siempre he creído que es un gran error. Es un gran álbum que urge revalorizar, el último disco donde U2 en verdad se arriesgó, ya que, a la postre, se instalaría en una zona de confort, donde los éxitos y las ventas son seguras. Es una lástima que la banda haya tomado ese camino, ya que de 1990 a 1997 demostró que podía ser artista en toda la extensión de la palabra y no hacedora de canciones facilonas como “With or Without You”.


 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Attila

  Por Oscar Fernández Herrera     Para bien y para mal, la música italiana ha tenido un profundo impacto en el pop mexicano. Desde hac...